viernes, 16 de octubre de 2009
El mayor cráter de la Tierra, oculto junto a la costa india
Provocado por un asteroide de 40 km de diámetro
MADRID, 15 Oct. (OTR/PRESS) -
Una misteriosa cuenca en el fondo marino frente a la costa de la India podría ser la huella del mayor lugar de impacto de un objeto procedente del espacio que el mundo haya visto nunca. Si un nuevo estudio está en lo correcto, puede de paso haber sido responsable de la aniquilación de los dinosaurios hace más de 65 millones de años.
Sankar Chatterjee, de la Universidad Texas Tech y un equipo de investigadores ha realizado un estudio de la gran cuenca Shiva, una depresión sumergida al oeste de la India que es conocida por la existencia de grandes recursos de petróleo y gas. Algunos comjuntos de cráteres están entre los yacimientos de hidrocarburos más productivos en el planeta.
"Si estamos en lo cierto, este es el mayor cráter conocido en nuestro planeta" declaró Chatterjee. "Un bólido de unos 40 kilómetros de diámetro pudo crear su aspecto tectónico", afirma. En contraste, el objeto que impactó en la Península del Yucatán, y al que comúnmente se atribuye la extinción de los dinosaurios tenía un diámetro de entre 8 y 10 kilómetros, según informa The Geological Society of America, en cuya reunión anual se presentará el estudio.
Es difícil de imaginar un cataclismo de estas características, pero si este equipo está en lo cierto, el impacto de Shiva vaporizó la corteza terrestre en el punto de la colisión, permitiendo emerger material depositado en el manto. Es posible que ese impacto tuviera correlato con la actividad volcánica que afectó a gran parte del oeste de la India e, incluso, provocó el desplazamiento de las islas Seichelles de la placa tectónica de la India con dirección hacia África.
La evidencia geológica es dramática. El borde exterior de Shiva forma un anillo de unos 500 kilómetros de diámetro alrededor de un pico central, denominado Bombay High, que se eleva más de 4.500 metros sobre el fondo marino. La mayor parte del crater está sumergido bajo la plataforma continental de la India. El equipo confía en viajar a la India a fin de año para tomar muestras de las rocas en ese fondo marino que demuestren finalmente que se trata de un cráter.
Hallado en China fósil de nuevo dinosaurio volador
Científicos chinos y británicos anunciaron el hallazgo de una nueva especie de pterodáctilo que viene a cuestionar muchos supuestos sobre cómo evolucionaron estos dinosaurios voladores.
El animal fue bautizado Darwinopterus modularis en honor a Charles Darwin, de quien se están celebrando en el 2009 los 200 años de su nacimiento y los 150 años desde que publicó su famosa obra El origen de las especies .
Según el artículo publicado en la última edición de Proceedings of the Royal Society B , más de 20 esqueletos fosilizados de esta especie fueron encontrados en el noreste de China.
Las rocas donde se hallaron los fósiles tienen unos 160 millones de años de antigüedad, lo que hace concluir a los científicos que esta especie vivió por lo menos dos millones de años antes del primer pájaro, el Archaeopteryx .
Enlace. Según explicaron los científicos, dirigidos por Junchang Lu, del Instituto de Geología de Pekín, el Darwinopterus modularis puede considerarse el enlace entre los pterodáctilos (también conocidos como pterosaurios) primitivos de cola larga y sus descendientes, que contaron con colas más cortas.
Estos últimos individuos más evolucionados también tenían una capacidad de vuelo más sofisticadas y alcanzaron en algunos casos tamaños gigantescos, con una envergadura alar de hasta 15 metros.
Los paleontólogos dijeron que las características de este nuevo animal los sorprende. “Siempre habíamos esperado a que el eslabón perdido tuviera rasgos intermediarios, como una cola moderadamente larga”, explicó uno de ellos, David Unwin, científico de la Universidad de Leicester (Gran Bretaña) en un comunicado de prensa.
“Lo que es extraño con el Darwinopterus modularis es que tiene una cabeza y un cuello similares a los de los pterosaurios evolucionados, en tanto que el resto de su esqueleto, incluyendo la muy larga cola, es idéntico a los de las formas primitivas de la especie”, agregó.
Los paleontólogos estiman que, en el curso de la evolución de los pterosaurios, la cabeza y el cuello cambiaron en primer lugar, y sólo luego lo hicieron el cuerpo, la cola, las alas y las patas.
sábado, 26 de septiembre de 2009
Extraño cementerio de jovenes dinosaurios
Hace 90 millones de años, un grupo de dinosaurios se acercaba a la orilla de un lago en el actual desierto de Gobi (Mongolia). La excursión acabó en desastre: en una de esas pequeñas tragedias que tan rentables resultan a la paleontología, los animales quedaron inmovilizados con sus patas traseras hundidas en el barro. Sus intentos de escapar fueron en vano.
Una manada de jóvenes dinosaurios parecidos a los actuales pájaros encontraron su muerte colectiva en los márgenes cubiertos de barro de un lago hace unos 90 millones de años, de acuerdo con la excavación realizada por un equipo de paleontólogos chinos y estadounidenses en pleno Desierto de Gobi, en el norte de China.
Esta repentina muerte colectiva en una trampa de barro proporciona una curiosa instantánea de la conducta social de aquellas especies. Integrada completamente por ejemplares jóvenes del dinosuario sinornithomimo, esta manada sugiere que los individuos inmaduros de esta especie eran abandonados cuando los adultos debían preocuparse de criar nuevas proles, según los investigadores.
Los hallazgos han sido publicados en la revista Acta Palaeontologica Polonica y el estudiuo fue financiado por la National Geographic Society. “Encontrar una manada que ha perecido en un barrizal es muy extraño entre las especies animales actuales”, explicó David Varricchio, miembro de la expedición e investigador de la Universidad de Montana State. “Los mejores ejemplos (en superar este tipo de peligros) son los animales provistos de pezuñas”, tales como el búfalo de agua en Austria o los caballos salvajes en el Oeste Americano.
Los primeros huesos fueron localizados por un geólogo chino en 1978 en la base de una pequeña colina, en pleno Desierto de Gobi. Veinte años más tarde un equipo chino-japonés excavó la zona y encontró los primeros esqueletos, denominando al dinosaurio sinornithomimo. Ahora, el nuevo equipo, dirigido por Paul Sereno, de la Universidad de Chicago, profundizó en el yacimiento y logró localizar 25 ejemplares de este dinosuario, y por el análisis del crecimiento óseo han determinado que todos ellos oscilan entre uno y siete años de edad en el momento en que encontraron la muerte.
Los Dinosaurios
La palabra dinosaurio (deinos: terrible, saurus: reptil), fue empleada por primera vez por un pionero de la paleontología, Richard Owen, en el año 1842, para designar a una serie de reptiles que se descubrieron en Inglaterra en esa época. Dinosaurio es un término colectivo que agrupa a dos órdenes de reptiles mesozoicos, los SAURISCHIA y los ORNITHISCHIA. Se diferencian por una serie de caracteres, incluyendo la naturaleza de la pelvis. Su antecesor es un grupo triásico, los TECODONTOS, que también dieron lugar a los cocodrilos, los reptiles voladores y las aves. Los dinosaurios pertenecen a un grupo extinto de reptiles que aparecieron hace unos 230 millones de años durante el Triásico con su máximo esplendor en el período Jurásico y se extinguió hace unos 65 millones de años a finales del Cretácico.
Se conocen por sus restos fósiles unas 350 especies diferentes. Existían dinosaurios carnívoros, algunos eran devoradores de plantas y otros tenían una dieta mixta de carne y plantas, como los humanos. No está totalmente claro si eran puramente homeotermos (endotérmicos o de sangre caliente), como los modernos mamíferos, o poiquilotermos (ectotérmicos o de sangre fría), como los reptiles de la actualidad. Los continentes, que al comienzo sólo eran una gran masa de tierra, fueron separándose hasta optar la disposición moderna que conocemos ahora. A comienzo de la era de los dinosaurios, en el paisaje dominaban arbustos parecidos al helecho. Luego llegó un tiempo en el que aparecieron los bosques de colosales. Más adelante sucedió el cambio más importante cuando aparecieron las primeras plantas de flores (fanerógamas). Los dinosaurios tuvieron que adaptarse a días de mucho sol y noches de oscuridad. También se producían continuas erupciones volcánicas, violentas tormentas y riadas repentinas.
¿Cuantas Especies de Dinosaurios Hay?
Se conocen por sus restos fósiles unas 350 especies diferentes. Existían dinosaurios carnívoros, algunos eran devoradores de plantas y otros tenían una dieta mixta de carne y plantas, como los humanos. No está totalmente claro si eran puramente homeotermos (endotérmicos o de sangre caliente), como los modernos mamíferos, o poiquilotermos (ectotérmicos o de sangre fría), como los reptiles de la actualidad. Los continentes, que al comienzo sólo eran una gran masa de tierra, fueron separándose hasta optar la disposición moderna que conocemos ahora. A comienzo de la era de los dinosaurios, en el paisaje dominaban arbustos parecidos al helecho. Luego llegó un tiempo en el que aparecieron los bosques de colosales. Más adelante sucedió el cambio más importante cuando aparecieron las primeras plantas de flores (fanerógamas). Los dinosaurios tuvieron que adaptarse a días de mucho sol y noches de oscuridad. También se producían continuas erupciones volcánicas, violentas tormentas y riadas repentinas.
¿Cuantas Especies de Dinosaurios Hay?
Encuentran en China al "padre" del Tiranosaurio Rex
Un grupo de científicos ha hallado en una región china restos fósiles del que sería "el padre" del 'Tiranosaurio Rex', es decir, el más primitivo de estos ejemplares, y que habría vivido en el Jurásico superior, en vez de en el Cretácico, que es un periodo posterior del que data la mayoría de estos dinosaurios.
Una de "las sorpresas" que se han llevado los científicos durante el estudio de los restos fósiles de este ejemplar primitivo de 'Tiranosaurio Rex', que dataría de hace unos 160 millones de años, es que el animal contaría con un enorme montículo vinculado a la cavidad nasal en su cráneo.
Esta estructura física pudo servirle al animal a modo de ornamento sexual, similar a la cola del pavo real o a la cornamenta del arce, según la interpretación que hacen los investigadores.
Los autores del estudio, del Instituto de Paleontología Vertebrada y Paleontropología de Pekín y de la Universidad de Maryland, analizaron restos fósiles de un ejemplar del temido 'Tiranosaurio Rex', localizados en la cuenca de Junggar, en el noroeste de China, según publica el último número de la revista Nature.
Esta criatura, que según sus investigaciones tendría una longitud de unos tres metros, es posiblemente el 'Tiranosaurio Rex' más antiguo descubierto.
El hallazgo permitirá a los paleontólogos vislumbrar algo de claridad respecto a uno de los momentos más oscuros que existen en el conocimiento de la evolución de los dinosaurios.
Aunque la famosa producción cinematográfica de Hollywood, 'Jurassic Park', sitúa en el Jurásico a los temibles 'Tiranosaurios Rex', los fósiles encontrados de este animal desvelan que la inmensa mayoría de ellos vivió en la época del Cretácico.
Del análisis de los restos de fósiles del 'padre' de los 'Tiranosaurios Rex' se desprende que compartiría varias características de los ejemplares posteriores, y también que habría sido un fiero predador.
El Cretáceo o Cretácico, posterior al Jurásico, comenzó hace unos 145 millones de año y su final llegó hace unos 65 millones de años, coincidiendo con la caída de un enorme meteorito que pudo causar la extinción de los dinosaurios, dando fin a la Era Mesozoica y apareciendo los mamíferos y las aves primitivas.
El petroleo pudo contribuir a la desaparicion de los dinosaurios
Una nueva teoría arroja luz a las causas que llevaron a la extinción de los dinosaurios. Un equipo internacional de investigadores ha descubierto, al examinar sedimentos del final de la era de estos animales, restos de ceniza que sólo pueden haber sido producto del incendio de combustibles fósiles como el petróleo. El hallazgo apunta a que los dinosaurios habrían desaparecido hace 65 millones de años en parte por un gran fuego en una reserva petrolífera tras el catastrófico impacto de un meteorito.
El equipo de científicos, cuyo estudio aparece publicado en la última edición de la revista Geology, ha encontrado en 8 de 13 sedimentos estudiados por todo el mundo una serie de esferas de carbono microscópico denominadas cenoesferas. Las pistas descubiertas, que se forman con la combustión de hidrocarburos fósiles como el carbón o el crudo, están presentes sólo en la capa de sedimento conocida como frontera KT (momento en que se sitúa el impacto del enorme meteorito que acabó con el reino de estos grandes animales, entre el periodo Cretácico y Terciario). Según los investigadores, es una evidencia clara de que el asteroide –que impactó en la península de Yucatán, en México- chocó contra una gran reserva de petróleo en el Golfo de México.
Los científicos creen que el impacto primero provocó la evaporación del combustible y después un incendio que se expandió probablemente miles de kilómetros. Aunque se desconoce si el fuego fue suficiente para causar la muerte directa de especies de dinosaurios (bien por las llamas, por la ceniza o por una aumento descomunal de la temperatura del planeta).
En declaraciones recogidas por ScienceNOW, el paleobotánico Peter Wilf, de la Universidad de Pensilvania, en EE UU, asegura que el artículo publicado en Geology aporta “una firme explicación de los restos de la misteriosa ceniza descubierta en la frontera K-T” y ayudará a los investigadores “a entender mejor las condiciones medioambientales que rodearon al desastre, y por tanto, son muy importantes a la hora de interpretar la extinción en masa y la consiguiente recuperación de la vida”.
Gigantoraptor: Dinosaurio gigante con plumas
Un equipo de científicos chinos ha descubierto el fósil de un gigantesco dinosaurio desconocido hasta ahora, de unos 70 millones de años de antigüedad que, parecido a un ave, se calcula que llegó a pesar 1.400 kilos, según publica la revista ‘Nature’.
El esqueleto incompleto del animal, un dinosaurio carnívoro bautizado con el nombre de ‘Gigantoraptor erlianensis’ y que vivió al final de la época del Cretáceo, fue descubierto en la Mongolia Interior, en China.
Se trata de un hallazgo que ha sorprendido a los científicos porque hasta ahora las teorías sugerían que los dinosaurios carnívoros disminuyeron de tamaño conforme su cuerpo se pareció más al de las aves. Sin embargo, en este caso los huesos encontrados sugieren que el animal podría alcanzar un peso de unos 1.400 kilos.
Dirigido por el profesor Xing Xu, de la Academia de las Ciencias de China, el equipo investigador llevó a cabo un análisis filogenético de los restos del animal, tras el cual lo agruparon en la familia de los ‘Oviraptor’, del subgrupo de los terópodos, de los que se cree que fueron los antepasados de los pájaros que viven en la Tierra hoy en día.
El pico, sus largas patas y un cráneo pequeño con una cresta angosta son algunas de las muchas similitudes que el nuevo dinosaurio comparte con la familia de los ‘Oviraptors’, aunque los 1.400 kilos en los que se estima el peso del ‘Gigantoraptor’ superan en 35 veces el de esos dinosaurios, una especie de animales pequeños con una masa corporal que raramente excedía los 40 kilos.
Los descubridores del fósil estiman en ocho los metros de largo y 3,5 los metros de alto que habría medido el dinosaurio descubierto, al tiempo que observaron indicios de un crecimiento interrumpido, lo que indica que era joven cuando murió y que, por tanto, sus dimensiones adultas aún deberían haber sido mayores.
Según el equipo investigador, el ‘Gigantoraptor’ debió de alcanzar tales medidas por crecer a una velocidad superior a la de los imponentes tiranosaurios de América del Norte, como el ‘Albertosaurus’ y el ‘Gorgosaurus’.
Con una mandíbula pequeña propia de los ‘Oviraptor’, el dinosaurio también presenta algunas diferencias con respecto a esta familia que, como su gran envergadura, indican que la diversidad morfológica entre los dinosaurios es mayor de lo que previamente se pensaba.
Las huellas de dinosaurio mas antiguas de Sudamerica
Dos paleontólogos argentinos han confirmado que las huellas de dinosaurio descubiertas hace meses en el sur de Bolivia por dos campesinos y que tienen más de 144 millones de años, son las más antiguas de Sudamérica.
El especialista Sebastián Apesteguía informó de que el hallazgo consiste en unas 300 huellas de dinosaurio de más de 144 millones de años de antigüedad, que se encuentran en el municipio de Icla, en el departamento de Chuquisaca.
“Hemos tenido la suerte de hallar la localidad con las huellas más antiguas del continente, cuya data duplica a todas las demás conocidas”, aseguró Apesteguía. El paleontólogo argentino, acompañado de su compatriota Pablo Ariel Gallina, permanecieron 10 días desde el pasado 31 de octubre realizando estudios en la zona.
“Tenemos un dinosaurio de tipo herbívoro que camina junto a sus crías, un dinosaurio carnívoro y otro acorazado que podría ser un anquilosaurio o un ceratopsio”, señaló el investigador.
Sin embargo, comentó que el próximo mes, tras continuar con sus trabajos en Argentina, “se sabrá a ciencia cierta qué tipo de animales fueron los que dejaron sus huellas en ese sector”.
“Estamos empezando a registrar una nueva fauna de dinosaurios desconocida que hasta ahora no se había registrado en Bolivia”, afirmó el científico.
Para Apesteguía, otro dato interesante es que las huellas del adulto están junto a las de sus crías, lo que “significa que hay un comportamiento de manada y protección y eso es importante a la hora de analizar el hallazgo”.
Un dinosaurio de Mongolia cuestiona el origen de las aves
Una especie de dinosaurio encontrada en Mongolia demuestra que algunos de los antecesores de los pájaros eran animales pequeños mucho antes de que ‘levantaran’ el vuelo. El dinosaurio, denominado ‘Mahakala omnogovae’, tan sólo tiene 70 centímetros de altura. Su descripción y las implicaciones del hallazgo constituyen el cuerpo de un artículo publicado en ‘Science’.
En 1861, dos años después de que Charles Darwin publicara su conocida obra ‘El origen de las especies’ se encontró en Solnhofen, Alemania, el fósil de un dinosaurio de pequeño tamaño que parecía tener plumas. Recibió el nombre de ‘archaeopteryx’ (de ‘archaeo’, antiguo, y ‘pteryx’, pluma).
El ‘archaeopteryx’ era un animal pequeño, lo que no es casual. Volar exige mucha energía y, por tanto, mucho alimento. De ahí que no esté al alcance de los animales grandes. El descubrimiento de varios ‘dinosaurios emplumados’ de gran tamaño fue consolidando la idea de que la miniaturización fue una de las últimas etapas del proceso evolutivo que llevó a algunos dinosaurios a convertirse en aves.
Un ejemplo es el ‘beipiaosaurus’, un dinosaurio de 2,2 metros de largo, que fue encontrado en China. Cubriendo su cuerpo se encontraron ‘protoplumas’, estructuras filamentosas similares a pelos. Obviamente, con semejante tamaño este animal no podía volar; pero podría ser un buen antepasado de ‘algo’ que sí lo hiciera. ‘Archaeopteryx’, ‘beipiaosaurus’ y otros ‘dinosaurios emplumados’ habrían evolucionado de un ancestro común denominado ‘protoave’; que también sería el antecesor de las aves.
Pero el descubrimiento realizado en Mongolia por un equipo de investigadores estadounidenses podría cambiar esta visión de los hechos. El análisis filogenético de ‘Mahakala omnogovae’ (o ‘Honey’, miel, como le llaman sus descubridores) demuestra que se trata de una especie ‘basal’ de ‘dromeosaurio’; es decir, se encuentra en el origen mismo de esta familia de dinosaurios, que es muy cercana a la de las aves.
Dicho de otro modo: ‘Mahakala omnogovae’, alias ‘Honey’, es una especie de dinosaurio muy cercano a las ‘protoaves’. Por tanto, la miniaturización no habría sido una etapa final del proceso que llevó a los dinosaurios hacia las aves.
Un aspecto sobre el que los investigadores inciden es que hubo bastantes dinosaurios que evolucionaron por agrandamiento de las ‘paraaves’. De hecho, al menos cuatro dinosaurios multiplicaron enormemente su tamaño con respecto a aquéllas. Tres serían dromeosaurios; es decir, ‘hermanos evolutivos’ de ‘Honey’.
Descubren el dinosaurio mas pesado de Asia en China
Científicos de la provincia de Henan, centro de China, anunciaron el día 3 que desenterraron los fósiles del dinosaurio más pesado de Asia.
Los fósiles fueron descubiertos en un área entre el cantón Santun y el cantón Liudian del distrito Ruyang, y el dinosaurio, que tiene un coelom (la cavidad del cuerpo que contiene el tracto digestivo) extraordinariamente largo, ha sido identificado como el más pesado de Asia, dijo Wu Guochang, ingeniero general del departamento provincial de recursos terrestres.
El dinosaurio mide 18 metros de largo y su sacro, la parte de los vertebrados en la espalda baja, es de 1,31 metros de ancho, más amplio que el del dinosaurio desenterrado en Gansu el año pasado, que era considerado el más pesado de Asia.
Los científicos creían que el área de donde fueron extraídos los fósiles se formó en la era Cenozoica, que data de hace 65 millones de años, y que la existencia de los dinosaurios previa a ese periodo no era posible, pero los residentes locales siguieron cavando y desenterraron lo que llamaron “huesos de dragón” para usarlos como medicina tradicional china.
Los científicos estudiaron los “huesos de dragón” y los identificaron como fósiles de un dinosaurio que vivió hace 85 ó 100 millones de años en el periodo cretácico de la era Mesozoica. El dinosaurio era un saurópsido vegetariano y los fósiles están bien preservados.
Científicos del museo geológico de la provincia de Hunan y de la Academia de Ciencias Geológicas de China dedicaron dos años a desenterrar e investigar los fósiles y sus hallazgos han sido evaluados por 30 científicos de China y de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Japón.
El descubrimiento es muy importante para la investigación de la distribución geológica, de la migración y de la evolución de esta especie de dinosaurio en particular, dijo Dong Zhiming, un científico del Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados, subordinado a la Academia de Ciencias de China.
Descubren un dinosaurio hervívoro con una dentadura plana de más de 500 dientes
Comía plantas a ras de suelo y no levantaba la cabeza, por lo que pone en duda que su pariente el diplodocus utilizase su largo cuello para llegar a las hojas de los árboles.
Un grupo de paleontólogos anunció ayer el descubrimiento de un nuevo dinosaurio que se considera la "vaca" de la época Mesozoica. De cuerpo frágil, tenía más de 500 dientes que segaban la vegetación a ras de suelo en un territorio que se corresponde actualmente con el desierto del Sahara.
Es el Nigersaurus, un animal del tamaño de un elefante, pero con huesos muy finos, algunos del grosor de una pluma, cuya morfología pone en tela de juicio la visión tradicional de sus parientes más famosos, los diplodocus norteamericanos, que han sido retratados como el equivalente en dinosaurio de las jirafas actuales: mastodontes de largos cuellos que comían hojas de los árboles.
El Nigersaurus, por el contrario, es la primera especie de dinosaurio que ofrece pruebas inequívocas de que se alimentaba únicamente de vegetación a ras de suelo, explicó Jeff Wilson, uno de los científicos que lo descubrió. Por eso Wilson cree que la imagen tradicional de los diplodocus es errónea y que ellos también, como el Nigersaurus, apenas levantaban la cabeza de la tierra.
Esa es una de las lecciones que ofrece hoy este extraño animal, que vivió hace 110 millones de años y cuyo pariente más cercano es un dinosaurio aún sin bautizar encontrado en 2001 en Salas de los Infantes, en la provincia española de Burgos, según los datos aportados por Wilson, que es también profesor de la Universidad de Michigan.
Un grupo de paleontólogos anunció ayer el descubrimiento de un nuevo dinosaurio que se considera la "vaca" de la época Mesozoica. De cuerpo frágil, tenía más de 500 dientes que segaban la vegetación a ras de suelo en un territorio que se corresponde actualmente con el desierto del Sahara.
Es el Nigersaurus, un animal del tamaño de un elefante, pero con huesos muy finos, algunos del grosor de una pluma, cuya morfología pone en tela de juicio la visión tradicional de sus parientes más famosos, los diplodocus norteamericanos, que han sido retratados como el equivalente en dinosaurio de las jirafas actuales: mastodontes de largos cuellos que comían hojas de los árboles.
El Nigersaurus, por el contrario, es la primera especie de dinosaurio que ofrece pruebas inequívocas de que se alimentaba únicamente de vegetación a ras de suelo, explicó Jeff Wilson, uno de los científicos que lo descubrió. Por eso Wilson cree que la imagen tradicional de los diplodocus es errónea y que ellos también, como el Nigersaurus, apenas levantaban la cabeza de la tierra.
Esa es una de las lecciones que ofrece hoy este extraño animal, que vivió hace 110 millones de años y cuyo pariente más cercano es un dinosaurio aún sin bautizar encontrado en 2001 en Salas de los Infantes, en la provincia española de Burgos, según los datos aportados por Wilson, que es también profesor de la Universidad de Michigan.
Argentina: bebés dinosaurio
Los dinosaurios pertenecen al grupo de los saurópodos.
Seis huevos que contienen fósiles de bebés dinosaurio fueron encontrados en Argentina.
Los cráneos, que están muy bien preservados, pueden dar nuevas pistas sobre cómo se desarrollaban y evolucionaban las cabezas de los antiguos dueños del planeta.
Los fósiles fueron encontrados en la región de Auca Mahuida, un área en donde han sido hallados con anterioridad restos de dinosaurios, de entre 65 y 145 millones de años.
Los dinosaurios de este último descubrimiento pertenecen a la familia de los titanosaurios -miembros del grupo de cuello largo, herbívoros de cola larga llamados saurópodos.
"Los casi completos cráneos pueden echar luz a sobre el desarrollo de las cabezas de los saurópodos, una de las piezas craneanas más notables
Luis Chiappe, investigador
El primer titanosaurio fue encontrado en 1842. A partir de ese año, nuevos fósiles de este tipo fueron hallados en todos los continentes excepto la Antártida y Australasia.
Pero es muy difícil encontrar los cráneos bien preservados, porque los huesos que conforman la cabeza son muy frágiles.
Los cráneos encontrados en Argentina están en tan buenas condiciones que incluso pueden verse los dientes desarrollándose en la mandíbula.
El equipo de investigadores que realizó el hallazgo, liderados por Luis Chiappe del Museo de Historia Natural del condado de Los Ángeles, señaló que a partir del descubrimiento se pueden encontrar nuevas respuestas a la evolución de los dinosaurios.
"Los casi completos cráneos pueden echar luz a sobre el desarrollo de las cabezas de los saurópodos, una de las piezas craneanas más notables", escribió Chiappe en la publicación Science.
Todavía no se ha precisado a que clase de titanosaurios pertenecen los dinosaurios encontrados, ya que se hallaron restos de al menos tres especies distintas.
A lo largo de estos años se han identificado al menos 30 clases de saurópodos. El más largo fue hallado en la patagonia argentina -fue bautizado Argentinosaururs huinculensis-, medía 40 metros y su peso alcanzaría las 90 toneladas.
Los saurópodos eran unas de las criaturas más alta que jamás que han pisado el planeta.
viernes, 11 de septiembre de 2009
Dinosaurios - Rebaños
Algunas de las huellas y fósiles que se han encontrado permiten aventurar que cierto tipo de dinosaurio vivía en grupos. Es muy probable los herbívoros lo hayan hecho para así poder protegerse, como lo hacen en la actualidad los antílopes. Los dinosaurios carnívoros debían salir a cazar fácilmente.
¿En el rebaño se cuidaban entre sí?
Algunos rastros fósiles nos muestran que en algunas ocasiones ubicaban en el centro de los rebaños a los más pequeños y los adultos se ponían rodeándolos para así poder protegerlos. Se cree que los Triceratops hacían un circulo alrededor de sus crías, con los cuernos orientados hacia el enemigo, como lo hace le buey almizclero.
¿Algunos dinosaurios vivían solos?
Los de gran tamaño y además carnívoros, como el Albertosaurus era un excelente cazador. Este dinosaurio, por razones obvias, tenía pocos enemigos. Quizás vivieron solos y cazaban solos también. Pero en Estados Unidos se encontraron huesos de Allasaurus adultos y pequeños juntos, lo que nos hace pensar que tal vez cazaran juntos.
¿Por que algunos vivían juntos?
Muchos herbívoros como por ejemplo, el Edmontosaurus con el fin de protegerse formaban rebaños, esto lo hacían ya que varios pares de ojos tenían más capacidad para detectar a los predadores con más eficacia que uno solo. Por este motivo a un predador le resultaba difícil atracar a un rebaño grande en movimiento. Los hadrosaurios probablemente gritaran si había peligro cerca.
¿Cómo sabemos si existían rebaños?
En Norteamérica se encontraron muchas huellas fosilizadas que avanzaban juntas en la misma dirección. Muchos dinosaurios aparecieron sepultados juntos. Uno de estos yacimientos tenía 10.000 Maiasaura, que contaba con un pico similar al de los patos. Esto le permitía suponer que los sauropodos vivían en grupos.
¿Por qué algunos rebaños morían?
En el año 1947, en Rancho Fantasma (Nueva México, Estados Unidos) se encontraron restos fósiles de un gran rebaño de Coelophysis, dentro de ellos se encontraban animales jóvenes y viejos. Algunos investigadores creen que pudieron haber muerto todos juntos en una inundación que se origino repentinamente. Los cadáveres fueron arrastrados por el agua y se depositaron en un banco de arena, lugar donde se fosilizaron.
¿Los dinosaurios recorrían grandes distancias?
En la actualidad, animales como el caribú y el ñu tienen que recorrer grandes distancias parta poder encontrar comida. Es muy posible que los iguanodone hayan hecho lo mismo.
¿Los rebaños tenían centinelas?
Si bien no se ha comprobando, se cree que es posible que así sea. Como lo hacen en la actualidad los adultos de varias especies, cuidan para que no se acerquen los predadores.
¿Los rebaños migraban?
Se han encontrado fósiles de dinosaurios en el Ártico y en la Antártica. Seguramente alli había mucha comida en el verano, pero muy poca el la época de frío. Quizás por eso los rebaños migraban de los polos durante el invierno.
¿Qué dinosaurios cazaban en jauría?
Los carnívoros como los lobos y las hienas cazaban en jauría.
Puede ser que muchos dinosaurios carnívoros de pequeño tamaño como el Elaphrosaurus también lo hicieran. Esto les daba la posibilidad de atrapar y matar grandes presas.
¿En el rebaño se cuidaban entre sí?
Algunos rastros fósiles nos muestran que en algunas ocasiones ubicaban en el centro de los rebaños a los más pequeños y los adultos se ponían rodeándolos para así poder protegerlos. Se cree que los Triceratops hacían un circulo alrededor de sus crías, con los cuernos orientados hacia el enemigo, como lo hace le buey almizclero.
¿Algunos dinosaurios vivían solos?
Los de gran tamaño y además carnívoros, como el Albertosaurus era un excelente cazador. Este dinosaurio, por razones obvias, tenía pocos enemigos. Quizás vivieron solos y cazaban solos también. Pero en Estados Unidos se encontraron huesos de Allasaurus adultos y pequeños juntos, lo que nos hace pensar que tal vez cazaran juntos.
¿Por que algunos vivían juntos?
Muchos herbívoros como por ejemplo, el Edmontosaurus con el fin de protegerse formaban rebaños, esto lo hacían ya que varios pares de ojos tenían más capacidad para detectar a los predadores con más eficacia que uno solo. Por este motivo a un predador le resultaba difícil atracar a un rebaño grande en movimiento. Los hadrosaurios probablemente gritaran si había peligro cerca.
¿Cómo sabemos si existían rebaños?
En Norteamérica se encontraron muchas huellas fosilizadas que avanzaban juntas en la misma dirección. Muchos dinosaurios aparecieron sepultados juntos. Uno de estos yacimientos tenía 10.000 Maiasaura, que contaba con un pico similar al de los patos. Esto le permitía suponer que los sauropodos vivían en grupos.
¿Por qué algunos rebaños morían?
En el año 1947, en Rancho Fantasma (Nueva México, Estados Unidos) se encontraron restos fósiles de un gran rebaño de Coelophysis, dentro de ellos se encontraban animales jóvenes y viejos. Algunos investigadores creen que pudieron haber muerto todos juntos en una inundación que se origino repentinamente. Los cadáveres fueron arrastrados por el agua y se depositaron en un banco de arena, lugar donde se fosilizaron.
¿Los dinosaurios recorrían grandes distancias?
En la actualidad, animales como el caribú y el ñu tienen que recorrer grandes distancias parta poder encontrar comida. Es muy posible que los iguanodone hayan hecho lo mismo.
¿Los rebaños tenían centinelas?
Si bien no se ha comprobando, se cree que es posible que así sea. Como lo hacen en la actualidad los adultos de varias especies, cuidan para que no se acerquen los predadores.
¿Los rebaños migraban?
Se han encontrado fósiles de dinosaurios en el Ártico y en la Antártica. Seguramente alli había mucha comida en el verano, pero muy poca el la época de frío. Quizás por eso los rebaños migraban de los polos durante el invierno.
¿Qué dinosaurios cazaban en jauría?
Los carnívoros como los lobos y las hienas cazaban en jauría.
Puede ser que muchos dinosaurios carnívoros de pequeño tamaño como el Elaphrosaurus también lo hicieran. Esto les daba la posibilidad de atrapar y matar grandes presas.
jueves, 10 de septiembre de 2009
miércoles, 2 de septiembre de 2009
Los monstruos que reinaron en la Prehistoria resucitan en 2009
Se ha conocido el descubrimiento de fósiles de dinosaurios. Se extinguieron hace 65 millones de años, pero todavía hoy siguen siendo objeto de estudio.
Los investigadores continúan encontrando fósiles de especies desconocidas de dinosaurios que nos dan pistas sobre su forma de vida y nos permiten entender cómo algunos animales han evolucionado hasta la actualidad.
Así, en las últimas semanas se han anunciado varios descubrimientos de fósiles que pertenecen a especies de las que no se tenía conocimiento.
1- El mayor depredador: El descubrimiento de la parte trasera de su cráneo en Noruega ha permitido saber que medía 15 metros de largo, pesaba 45 toneladas, sus dientes medían unos 30 centímetros y habitaba en los océanos hace 147 millones de años. Es una nueva especie de pliosaurio, reptiles acuáticos con un cráneo enorme, cuello corto y cuatro aletas. Era más grande que el Tirannosaurus Rex y su mordisco era cuatro veces más poderoso.
2- 'Hesperonychus elizabethae': El estudio de sus restos ha mostrado que era más pequeño que un gato, carnívoro y feroz. Los científicos lo han identificado como el saurio más pequeño de Norteamérica. Pesaba unos 2 kilos, medía 50 centímetros de alto y se parecía al temido Velociraptor. Caminaba sobre dos patas, tenía garras muy afiladas y poseía una uña en forma de hoz en su segundo dedo.
3- 'Tianyulong confuciusi': El hallazgo en China de un fósil de dinosaurio herbívoro con indicios de haber tenido algo similar a las plumas podría provocar el cambio de la teoría sobre el origen del plumaje en las aves, que hasta ahora se había atribuido a unos saurios carnívoros bípedos.
Hallan en Huesca los restos del dinosaurio más moderno encontrado en Europa
se ha podido recuperar gran parte de este nuevo dinosaurio, que tendría un tamaño medio de unos siete metros de longitud, lo que le convierte en el dinosaurio europeo conocido más completo del final del Cretácico.
Investigadores del grupo 'Aragosaurus-IUCA' de la Universidad de Zaragoza han hallado en la localidad de Arén (Huesca) los restos del dinosaurio más moderno encontrado en Europa, que vivió a finales del Cretácico, poco antes de la extinción de la especie. El ejemplar ha recibido el nombre de 'Arenysaurus Ardevoli', después de diez años de trabajos.Así, el descubrimiento, publicado en el último número de la revista paleontológic 'Paleovol', se ha encontrado en rocas de hace unos 66 millones de años, del Cretácico Superior, lo que, según los investigadores, significa que "sin duda los representantes de esta especie pudieron ver la caída del meteorito del límite Cretácico Terciario".
En la investigación, que también ha contado con la participación de expertos de la Universidad Complutense de Madrid, Universidad Autónoma de Barcelona, Universidad del País Vasco y el Museo del Jurásico de Asturias; se ha podido recuperar gran parte de este nuevo dinosaurio, que tendría un tamaño medio de unos siete metros de longitud, lo que le convierte en "el dinosaurio europeo conocido más completo del final del Cretácico", según destacan los paleontólogos.
Concretamente, han recuperado gran parte del cráneo (incluyendo el dentario izquierdo y parte del maxilar derecho), vértebras del cuello, de la espalda, del sacro, de la cola, el coracoides derecho, la escápula derecha, el húmero derecho, el pubis derecho y ambos fémures.Los expertos concluyen que es miembro de los 'hadrosáuridos', un grupo de dinosaurios comedores de plantas que tienen 'pico de pato' y eran muy abundantes en el Cretácico Superior de Norteamérica y Asia.Por otro lado, el estudio filogenético ha permitido precisar que 'Arenysaurus' es un 'hadrosáurido lambeosaurino', grupo en el que se integran dinosaurios con espectaculares estructuras craneales.
De este modo, la estructura craneal sería, según los investigadores, similar al dinosaurio norteamericano 'Parasaurolophus', si bien señalan que desconocen "como sería exactamente esa estructura en el 'Arenysaurus' ya que falta uno de los huesos del cráneo", pero la califican como "seguramente menos llamativa que la de 'Parasaurolophus'". El nombre 'Arenysaurus', se ha elegido "en honor a la localidad de Arén", mientras que el de 'Ardevoli' está dedicado a Lluis Ardevol, el geólogo que encontró los primeros restos fósiles.
Descubren un dinosaurio de hace 97 millones de años en Australia
La osamenta es en principio más completa que otras halladas con anterioridad.
Los paleontólogos han hallado los huesos de un dinosaurio, bautizado como «Zac», que calculan que vivió hace unos 97 millones de años en el mismo lugar del noreste australiano donde se han descubierto especies de esos reptiles fósiles, ha informado hoy la radio ABC.
El paleontólogo Scott Hocknull, del museo de Queensland, ha dicho que todavía necesitan efectuar un examen minucioso, pero creen que se trata de un saurópodo vegetariano o titanosaurio, una de las nuevas especies descubiertas y los animales más grandes que jamás pisaron la Tierra.
Hocknull ha explicado que han bautizado al ejemplar Zac, y ha añadido que su osamenta es en principio más completa que otras halladas con anterioridad.
El hallazgo de Zac y sus congéneres ha tenido lugar en un meandro prehistórico próximo a la población de Winton, en el estado de Queensland.
"Los descubrimientos hechos este año confirman la importancia del lugar, no solo para Australia, sino para tener una comprensión científica más profunda de la Edad de los Dinosaurios", ha dicho el paleontólogo.
Las nuevas especies aparecidas en esa zona son un terópodo (australovenator eintonensis) y dos clases de titanosaurios. En homenaje al poeta australiano Banjo Paterson, que escribió en Winton su famoso "Waltzing Matilda" en 1895, los tres nuevos ejemplares fósiles fueron bautizados Banjo, Matilda y Clancy.
martes, 1 de septiembre de 2009
Imágenes: el dino-pájaro perdido
Los pájaros son considerados "dinosaurios vivientes" - o al menos sus descendientes directos.
Esta teoría, formulada por los paleontólogos hace ya 140 años, recién pudo ser probada fehacientemente en la última década.
La clave fue el descubrimiento de restos fósiles de dinosaurios emplumados o "dino-pájaros" en las canteras de Liaoning, en el norte de China.
Tras un delicado y exhaustivo proceso de restauración y conservación, ahora 13 de esos fósiles son exhibidos en el Museo de Historia Natural de Londres.
En imágenes, un tesoro de 125 millones de años.
© The Geological Museum of China.
Este dromaeosaurio emplumado o fuzzy raptor, hallado en las canteras de Liaoning, China, encierra la clave sobre cómo los pájaros evolucionaron de los dinosaurios depredadores.
Los restos muestran claramente delicadas plumas alrededor de los esqueletos de estos pequeños dinosaurios.
Éste era un veloz bípedo emparentado con el velocirraptor, el temible predador que hizo célebre la película "Jurassic Park".
© The American Museum of Natural History.
En 1995, campesinos de la provincia de Liaoning, encontraron restos fósiles de pájaros en una capa de sedimento de 124 millones de años. Para los paleontólogos, fue el hallazgo de un tesoro.
© The Natural History Museum
Para limpiar y restaurar los delicados restos de los dino-pájaros, el equipo de la Unidad de Conservación Paleontológica del Museo de Historia Natural de Londres utilizó técnicas modernas de remoción de contaminantes, mediante la aplicación microscópica de químicos y resinas sintéticas.
© John Sibbick
El esqueleto del "eslabón perdido": el dromaeosaurio emplumado, también conocido como fuzzy raptor, que reúne las características de un dinosaurio depredador y del archaeopteryx, el primer pájaro.
© John Sibbick
Otra impresión del artista John Sibbick, que ilustra cómo habría lucido esta pieza clave de la evolución animal.
© The National History Museum
Fósil de un archaeopteryx, considerado el primer pájaro. El descubrimiento de estos restos en 1861 por parte de un minero alemán, fue el punto inicial de una investigación que ha durado más de 140 años.
Esta teoría, formulada por los paleontólogos hace ya 140 años, recién pudo ser probada fehacientemente en la última década.
La clave fue el descubrimiento de restos fósiles de dinosaurios emplumados o "dino-pájaros" en las canteras de Liaoning, en el norte de China.
Tras un delicado y exhaustivo proceso de restauración y conservación, ahora 13 de esos fósiles son exhibidos en el Museo de Historia Natural de Londres.
En imágenes, un tesoro de 125 millones de años.
© The Geological Museum of China.
Este dromaeosaurio emplumado o fuzzy raptor, hallado en las canteras de Liaoning, China, encierra la clave sobre cómo los pájaros evolucionaron de los dinosaurios depredadores.
Los restos muestran claramente delicadas plumas alrededor de los esqueletos de estos pequeños dinosaurios.
Éste era un veloz bípedo emparentado con el velocirraptor, el temible predador que hizo célebre la película "Jurassic Park".
© The American Museum of Natural History.
En 1995, campesinos de la provincia de Liaoning, encontraron restos fósiles de pájaros en una capa de sedimento de 124 millones de años. Para los paleontólogos, fue el hallazgo de un tesoro.
© The Natural History Museum
Para limpiar y restaurar los delicados restos de los dino-pájaros, el equipo de la Unidad de Conservación Paleontológica del Museo de Historia Natural de Londres utilizó técnicas modernas de remoción de contaminantes, mediante la aplicación microscópica de químicos y resinas sintéticas.
© John Sibbick
El esqueleto del "eslabón perdido": el dromaeosaurio emplumado, también conocido como fuzzy raptor, que reúne las características de un dinosaurio depredador y del archaeopteryx, el primer pájaro.
© John Sibbick
Otra impresión del artista John Sibbick, que ilustra cómo habría lucido esta pieza clave de la evolución animal.
© The National History Museum
Fósil de un archaeopteryx, considerado el primer pájaro. El descubrimiento de estos restos en 1861 por parte de un minero alemán, fue el punto inicial de una investigación que ha durado más de 140 años.
Dinosaurios muertos de frío
Los dinosaurios no pudieron adaptarse al cambio climático.
Un nuevo estudio indica que el frío estaba matando a los dinosaurios mucho antes de que chocara con la Tierra el asteroide que, según se cree, provocó su desaparición.
El impacto, ocurrido hace 65 millones de años en el llamado periodo Cretácico, fue probablemente el "golpe de gracia".
Hallazgo
Los dinosaurios habrían comenzado a extinguirse siete millones de años antes de lo que se creía
La causa: un abrupto descenso de la temperatura
El choque de un asteroide con la Tierra sólo habría dado el "golpe de gracia"
Investigadores australianos aseguran que, para entonces, la mitad de los dinosaurios ya habían desaparecido porque el clima se había vuelto muy frío.
Restos fósiles hallados en el valle de Drumheller, en Alberta (Canadá), que datan de siete millones de años antes del impacto del asteroide, mostraron que la temperatura promedio cayó de 25º C a 15º C.
Y muchos reptiles de sangre fría, como los cocodrilos, las tortugas y los dinosaurios herbívoros, murieron cuando el clima se enfrió.
El análisis de los isótopos de oxígeno en los fósiles suelen indicar la temperatura a la que se formaron, de modo que los científicos pueden estudiar los cambios del clima a lo largo de la historia.
Los investigadores descubrieron, además, una reducción en el nivel de lluvias anuales durante el periodo en el que varias especies comenzaron a extinguirse.
Invierno prolongado
Con todo, David Ebert, del Museo Real de Paleontología Tyrell de Canadá, quien estuvo a cargo del estudio, dijo que no está claro por qué los dinosaurios se vieron tan dramáticamente afectados por el cambio de temperatura.
En diálogo con la BBC, la doctora Angela Milnes, del Museo de Historia Natural del Reino Unido, ensayó una respuesta.
Explicó que los dinosaurios de sangre fría eran capaces de soportar un clima gélido, porque su gran tamaño les permitía mantener constante la temperatura corporal.
"Pero no estaban listos para un invierno tan prolongado", completó.
La investigación fue publicada en la revista británica Chemistry and Industry.
lunes, 31 de agosto de 2009
Un sapo gigante que vivio entre los dinosaurios
Un grupo de paleontólogos han descubierto en Madagascar el fósil de un sapo gigante que mide 40,6 centímetros y pesa 4,5 kilogramos y que vivió hace unos 70 millones de años entre los dinosaurios en África, según un artículo publicado en la revista científica Proceedings of the National Academy of Science.
El sapo, con una coraza gruesa y con dientes, fue una anfibio tan extraordinario que incluso podría haber devorado a dinosaurios recién nacidos, según los paleontólogos. Por sus características tan novedosas, los científicos, encabezados por el paleontólogo David Krause, de la Universidad Stony Brook, en Nueva York, lo han denominado “sapo diabólico”.
Los investigadores, que descubrieron los huesos del sapo gigante en el noroeste de Madagascar, creen que este anfibio pertenece a la familia de sapos que vive hoy en día en América del Sur. “Este sapo, si tuvo las mismas costumbres que los sapos de la misma familia de anfibios en América del Sur, era bastante voraz. Es incluso posible que haya devorado mamíferos, ranas más pequeñas y, teniendo en cuenta su tamaño, hasta dinosaurios incubados”, explicó Krause. Este paleontólogo comenzó a encontrar por primera vez en 1993 huesos de rana extraordinariamente largos en Madagascar, un área en el que Krause también había hallado fósiles de dinosaurios y de cocodrilos.
Pero no ha sido hasta ahora que el equipo del científico ha logrado acumular suficientes piezas para reconstruir el sapo y analizar lo que medía y pesaba el anfibio. Los fósiles del sapo datan de finales del periodo Cretáceo, aproximadamente unos 70 millones de años atrás. Actualmente, la rana más grande del mundo es la que se denomina Goliath, de África occidental, que puede llegar a medir 32 centímetros y a pesar 3,3 kilogramos.
El equipo de Krause, que ha dado al sapo el nombre científico “Beelzebufo ampigna”, ha trabajado con expertos del University College de Londres para determinar que su descubrimiento no se puede relacionar con otros sapos de África. Con sus características, el «Beelzebufo» podría ser el sapo más grande que haya existido jamás, afirman los paleontólogos.
Los científicos determinaron que el sapo gigante podría pertenecer a la familia de las ranas ceratophrys de América del Sur. El descubrimiento de los vínculos familiares del sapo gigante con anfibios similares en América del Sur arroja una duda sobre las teorías del desplazamiento de los continentes, indica Krause.
Las teorías indican que lo que hoy es Madagascar fue separado de América del Sur por el océano durante la era del sapo gigante, pero “las ranas no pueden sobrevivir durante mucho tiempo en agua salada”, asevera el paleontólogo. Por ello, el hallazgo de los científicos prueba, según Krause, que tenía que haber existido alguna conexión terrestre con América del Sur en aquella época, quizá a través de la Antártida, entonces mucho más cálida que hoy.
El sapo, con una coraza gruesa y con dientes, fue una anfibio tan extraordinario que incluso podría haber devorado a dinosaurios recién nacidos, según los paleontólogos. Por sus características tan novedosas, los científicos, encabezados por el paleontólogo David Krause, de la Universidad Stony Brook, en Nueva York, lo han denominado “sapo diabólico”.
Los investigadores, que descubrieron los huesos del sapo gigante en el noroeste de Madagascar, creen que este anfibio pertenece a la familia de sapos que vive hoy en día en América del Sur. “Este sapo, si tuvo las mismas costumbres que los sapos de la misma familia de anfibios en América del Sur, era bastante voraz. Es incluso posible que haya devorado mamíferos, ranas más pequeñas y, teniendo en cuenta su tamaño, hasta dinosaurios incubados”, explicó Krause. Este paleontólogo comenzó a encontrar por primera vez en 1993 huesos de rana extraordinariamente largos en Madagascar, un área en el que Krause también había hallado fósiles de dinosaurios y de cocodrilos.
Pero no ha sido hasta ahora que el equipo del científico ha logrado acumular suficientes piezas para reconstruir el sapo y analizar lo que medía y pesaba el anfibio. Los fósiles del sapo datan de finales del periodo Cretáceo, aproximadamente unos 70 millones de años atrás. Actualmente, la rana más grande del mundo es la que se denomina Goliath, de África occidental, que puede llegar a medir 32 centímetros y a pesar 3,3 kilogramos.
El equipo de Krause, que ha dado al sapo el nombre científico “Beelzebufo ampigna”, ha trabajado con expertos del University College de Londres para determinar que su descubrimiento no se puede relacionar con otros sapos de África. Con sus características, el «Beelzebufo» podría ser el sapo más grande que haya existido jamás, afirman los paleontólogos.
Los científicos determinaron que el sapo gigante podría pertenecer a la familia de las ranas ceratophrys de América del Sur. El descubrimiento de los vínculos familiares del sapo gigante con anfibios similares en América del Sur arroja una duda sobre las teorías del desplazamiento de los continentes, indica Krause.
Las teorías indican que lo que hoy es Madagascar fue separado de América del Sur por el océano durante la era del sapo gigante, pero “las ranas no pueden sobrevivir durante mucho tiempo en agua salada”, asevera el paleontólogo. Por ello, el hallazgo de los científicos prueba, según Krause, que tenía que haber existido alguna conexión terrestre con América del Sur en aquella época, quizá a través de la Antártida, entonces mucho más cálida que hoy.
Hallan gigantesco dinosaurio en Australia
BBC Ciencia
Paleontólogos australianos afirman que descubrieron una nueva especie de dinosaurio en una granja en el estado norteño de Queensland.
Queensland es una zona rica en fósiles.
Los restos fosilizados del enorme saurópodo herbívoro, bautizado Zac, tienen unos 97 millones de años de antigüedad.
Y fueron encontrados cerca de la ciudad de Eromanga, una zona rica en fósiles que en el período Cretácico estuvo cubierta por un vasto mar interior.
Según los científicos el hallazgo confirma la importancia de Australia como un centro para el descubrimiento de dinosaurios.
El ejemplar más grande que se ha encontrado en el país, llamado Cooper, fue descubierto en la misma granja en 2004.
Cementerio de dinosaurios
Cooper tiene unos 30 metros de largo y se trata de una nueva especie de titanosaurio, animales enormes y cubiertos con placas óseas como armaduras.
La nueva especie de saurópodo encontrada ahora, dicen los paleontólogos, es uno de los hallazgos más importantes de la zona.
"Es un descubrimiento extraordinario porque coloca a Queensland en centro del mapa de hallazgos paleontológicos de Australia" dijo a la BBC Scott Hocknull, paleontólogo del Museo de Queensland.
"Es como una búsqueda de tesoros. Porque estamos viendo hallazgos en todo Queensland, así que Australia se está convirtiendo realmente en el centro de los descubrimientos de dinosaurios".
Matilda, Clancy y Banjo fueron descubiertos en julio pasado.
Aunque el esqueleto de Zac es más pequeño que el de Cooper, el primero está más completo.
Los saurópodos tenían cuellos muy largos y cabezas muy pequeñas con dientes obtusos y una cola muy larga para contrarrestar la longitud del cuello.
Los paleontólogos creen que probablemente eran antepasados de las aves y pudieron haberse extinguido en parte debido a los efectos del calentamiento global.
Tal como informó el doctor Hocknull, los restos de Zac fueron encontrados sobresaliendo de la tierra y ahora planean llevar a cabo más excavaciones en la zona.
"Tiene que haber cientos de esqueletos debajo de la superficie. Pero los depósitos de huesos son extremadamente densos y difícilmente podemos moverlos para retirar los restos del dinosaurio", dice el paleontólogo.
A principios de este año fueron encontrados en la misma zona los restos de tres nuevas especies de dinosaurios, todos pertenecientes al mismo período de Zac, el Cretácico Inferior, hace unos 100 millones de años.
Paleontólogos australianos afirman que descubrieron una nueva especie de dinosaurio en una granja en el estado norteño de Queensland.
Queensland es una zona rica en fósiles.
Los restos fosilizados del enorme saurópodo herbívoro, bautizado Zac, tienen unos 97 millones de años de antigüedad.
Y fueron encontrados cerca de la ciudad de Eromanga, una zona rica en fósiles que en el período Cretácico estuvo cubierta por un vasto mar interior.
Según los científicos el hallazgo confirma la importancia de Australia como un centro para el descubrimiento de dinosaurios.
El ejemplar más grande que se ha encontrado en el país, llamado Cooper, fue descubierto en la misma granja en 2004.
Cementerio de dinosaurios
Cooper tiene unos 30 metros de largo y se trata de una nueva especie de titanosaurio, animales enormes y cubiertos con placas óseas como armaduras.
La nueva especie de saurópodo encontrada ahora, dicen los paleontólogos, es uno de los hallazgos más importantes de la zona.
"Es un descubrimiento extraordinario porque coloca a Queensland en centro del mapa de hallazgos paleontológicos de Australia" dijo a la BBC Scott Hocknull, paleontólogo del Museo de Queensland.
"Es como una búsqueda de tesoros. Porque estamos viendo hallazgos en todo Queensland, así que Australia se está convirtiendo realmente en el centro de los descubrimientos de dinosaurios".
Matilda, Clancy y Banjo fueron descubiertos en julio pasado.
Aunque el esqueleto de Zac es más pequeño que el de Cooper, el primero está más completo.
Los saurópodos tenían cuellos muy largos y cabezas muy pequeñas con dientes obtusos y una cola muy larga para contrarrestar la longitud del cuello.
Los paleontólogos creen que probablemente eran antepasados de las aves y pudieron haberse extinguido en parte debido a los efectos del calentamiento global.
Tal como informó el doctor Hocknull, los restos de Zac fueron encontrados sobresaliendo de la tierra y ahora planean llevar a cabo más excavaciones en la zona.
"Tiene que haber cientos de esqueletos debajo de la superficie. Pero los depósitos de huesos son extremadamente densos y difícilmente podemos moverlos para retirar los restos del dinosaurio", dice el paleontólogo.
A principios de este año fueron encontrados en la misma zona los restos de tres nuevas especies de dinosaurios, todos pertenecientes al mismo período de Zac, el Cretácico Inferior, hace unos 100 millones de años.
Noti-Dino
Descubren una nueva especie de dinosaurio en una granja de ovejas en Australia
27/08/2009 www.eleconomista.es
Paleontólogos australianos han descubierto una nueva especie de dinosaurio en una granja de ovejas al noreste de Australia, en el estado de Queensland. El fósil, apodado 'Zac', pertenece en concreto a la familia de los saurópodos, herbívoros de hace 97 millones de años. Los restos fueron encontrados cerca del municipio de Eromanga, en una zona rica en fósiles que antaño estuvo cubierta por un mar interior y donde en 2004 se encontró a 'Cooper', el dinosaurio más grande del país hasta entonces descubierto, con treinta metros de longitud y perteneciente a la familia de los titanosaurios. En cambio, 'Zac', como la familia de sauropodos, tiene un cuello muy largo, una cabeza pequeña y dientes afilados, así como una larga cola que se balanceaba al son del movimiento del cuello. Sus huesos se encontraban fuera del suelo por lo que los expertos prevén cavar en las inmediaciones ante la posible aparición de más esqueletos.
27/08/2009 www.eleconomista.es
Paleontólogos australianos han descubierto una nueva especie de dinosaurio en una granja de ovejas al noreste de Australia, en el estado de Queensland. El fósil, apodado 'Zac', pertenece en concreto a la familia de los saurópodos, herbívoros de hace 97 millones de años. Los restos fueron encontrados cerca del municipio de Eromanga, en una zona rica en fósiles que antaño estuvo cubierta por un mar interior y donde en 2004 se encontró a 'Cooper', el dinosaurio más grande del país hasta entonces descubierto, con treinta metros de longitud y perteneciente a la familia de los titanosaurios. En cambio, 'Zac', como la familia de sauropodos, tiene un cuello muy largo, una cabeza pequeña y dientes afilados, así como una larga cola que se balanceaba al son del movimiento del cuello. Sus huesos se encontraban fuera del suelo por lo que los expertos prevén cavar en las inmediaciones ante la posible aparición de más esqueletos.
Dinosaurios Carnivoros
En 1881, Othniel Charles Marsh (1831-1899), un famoso buscador de fósiles norteamericano, afirmó que todos los dinosaurios carnívoros debían agruparse juntos y propuso para ellos el nombre de terópodos, que significa pies de bestia. Los primeros terópodos aparecieron hace alrededor de 225 millones de años, poco después del inicio del Mesozoico, la Era de los Reptiles. Los dinosaurios carnívoros sobrevivieron durante 160 millones de años, hasta la extinción de los dinosaurios, hace 65 millones de años.
Características de los Dinosaurios Carnívoros
La mayoría de los dinosaurios carnívoros se desplazaban sobre extremidades delgadas acabadas en píes similares a los de las aves, dotados de tres dedos de afiladas garras, que les permitían desplazarse muy rápido, ciertamente más rápido que los lentos dinosaurios herbívoros.
Los miembros delanteros eran cortos, el torso compacto, la cola larga, el cuello curvo y flexible y los ojos grandes.
Cambios Evolutivos
Los dinosaurios carnívoros evolucionaron a lo largo de sus 160 millones de años de existencia. Sus cerebros aumentaron de tamaño, las patas traseras se hicieron más largas y delgadas y su visión mejoró.
Dientes y Picos
Los dinosaurios carnívoros tenían dientes o picos. Los dientes de los terópodos eran delgados y con forma de daga, con márgenes aserrados en los bordes delantero y trasero. Cuando el carnívoro mordía a su presa, los bordes serrados se aferraban a la carne de la víctima y se abrían paso provocando un profundo corte. Los carnívoros de pequeño tamaño tenían por lo general un mayor número de piezas dentales que los individuos grandes. Los carnívoros dotados de dientes solían tener piezas más largas hacia la mitad de sus mandíbulas, donde los músculos de éstas ejercían una mayor fuerza al morder.
Algunos carnívoros desarrollaron mandíbulas que carecían de dientes, en su lugar estos terópodos sin dientes poseían picos óseos cubiertos de una capa de esmalte. Estos picos, poco adecuados para desmenuzar la carne, habrían sido utilizados para romper huevos.
Tipos de Dinosaurios Carnívoros
Los primeros dinosaurios carnívoros
Los primeros dinosaurios carnívoros surgieron a mediados del Período Triásico, hace alrededor de 225 millones de años.
Eran animales mucho más pequeños y primitivos que los carnívoros más conocidos que aparecieron posteriormente durante el Mesozoico, como Tyrannosaurus rex.
• Eoraptor. Triásico, 225 millones de años, Sudamérica, 1 m de longitud.
Eoraptor es un animal importante por ser uno de los dinosaurios conocidos más antiguos, ya que vivió en los albores de la Era de los Reptiles. Eoraptor era un pequeño dinosaurio que se movía con rapidez por su entorno con sus dos largos y delgados miembros traseros, los cuales duplicaban la longitud de los miembros delanteros. Era carnívoro y podría haber sido tanto depredador como carroñero. Las mandíbulas alojaban numerosos dientes serrados de pequeño tamaño. Se han descubierto fósiles de Eoraptor a lo largo del curso de un antiguo río de Argentina, lo que plantea la cuestión de si Eoraptor se alimentaba de peces.
• Coelophysis. Triásico, 220 m.a., Norteamérica, 3 m de lonitud.
Coelophysis tenía una constitución óptima para correr y moverse con agilidad. Para reducir su peso, los huesos de sus extremidades eran casi huecos, algo que resultaba de gran ayuda a un animal que dependía de la velocidad para atrapar a su presa. Las patas delanteras eran pequeñas y probablemente las usó para sujetar y desgarrar el alimento. Podría haber sido un animal de manada, que vivía y cazaba en grupo.
• Herrerasaurus. Triásico, 220 m.a. Sudamérica, 3 m de longitud.
Herrerasaurus vivió en un medio boscoso, entre helechos y coníferas. Era un carnívoro de talla media y un depredador ágil y veloz. Las largas y esbeltas patas le conferían la agilidad para alcanzar a presas como los rincosaurios (reptiles herbívoros, de aspecto porcino, rechonchos, de movimientos lentos y que se desplazaban sobre sus cuatro patas). Herrerasaurus poseía una cabeza larga y estrecha, dotada de robustas mandíbulas equipadas con numerosos dientes afilados e inclinados hacia atrás. Las extremidades delanteras eran cortas y la cola larga. Cuando corría, probablemente mantenía la cola estirada en posición horizontal como contrapeso para de ese modo evitar caer de bruces.
• Compsognathus. Jurásico, 145 m.a. Europa, 1 m de longitud.
El pequeño dinosaurio Compsognathus era un depredador veloz que corría sobre sus largos miembros traseros. Las extremidades delanteras eran cortas y estaban dotadas de dos dedos con garras. Un cráneo grande alojaba numerosos dientes curvados y afilados, de tamaño pequeño y espaciados entre sí. Esta dentadura no podía infligir graves heridas a un animal grande, pero resultaba idónea para atrapar reptiles, insectos y mamíferos pequeños.
Los grandes Dinosaurios Carnívoros 1
Los carnívoros de gran tamaño comenzaron a aparecer durante el Período Jurásico, pero su mayor talla la alcanzaron en el período siguiente, el Cretácico. Robustos y poderosos, dotados de dientes afilados como cuchillos y de garras que podían arañar y despedazar la más gruesa de las pieles, estos terópodos podrían haber vagado en pequeños grupos, solos o en pareja.
• Dilophosaurus, Jurásico, 190 m.a. Norteamérica, 6 m de longitud
• Allosaurus, Jurásico/Cretácico, 140 m.a. Norteamérica, 12 m de longitud
• Neovenator, Cretácico, 125 m.a. Europa, 8 m de longitud
• Giganotosaurus, Cretácico, 90 m.a. Sudamérica, 15 m de longitud
Los grandes Dinosaurios Carnívoros 2
Éstos son algunos de los dinosaurios carnívoros gigantes cuyos dientes, garras y cuerpos musculosos estaban perfectamente diseñados para dar caza a sus presas. Ya fuera en grupo o en solitario, estos terópodos se encuentran entre los cazadores más formidables de la Era de los Reptiles.
• Megalosaurus, Jurásico, 170 m.a. Europa, 9 m de longitud
• Ceratosaurus, Jurásico, 150 m.a. Norteamérica, África, 6 m de longitud
• Albertosaurus, Cretácico, 70 m.a. Norteamérica, 9 m de longitud
• Therizinosaurus, Cretácico, 70 m.a. Asia, 12 m de longitud
• Tyrannosaurus rex, 70 m.a. Norteamérica, 12 m de longitud
miércoles, 26 de agosto de 2009
Un científico canadiense quiere transformar pollos en dinosaurios
Un científico canadiense quiere transformar pollos en dinosaurios
Un paleontólogo canadiense que pasó años buscando animales prehistóricos fosilizados quiere ahora devolverles la vida manipulando pollos genéticamente, anunció el científico este martes.
Hans Larsson, de la cátedra de macro-evolución de la Universidad McGill de Montreal, espera poder reproducir en estos gallináceos las características de dinosaurios desaparecidos hace millones de años, manipulando genéticamente embriones de pollos.
Esta investigación está en sus inicios, reconoció el científico en una entrevista con AFP, pero podría conducir un día a producir reptiles prehistóricos vivientes. No obstante, Larsson no tiene planes de llevar la investigación a ese punto, por razones éticas y prácticas.
Construir una criadero para dinosaurios "sería una empresa demasiado vasta". El objetivo es solamente ofrecer una "ilustración de la evolución", dijo Larsoon, que ha estudiado la evolución de las aves durante 10 años.
"Si puedo demostrar claramente que el potencial para el desarrollo anatómico de los dinosaurios existe en los pájaros, entonces esto prueba que las aves descienden directamente de los dinosaurios", dijo.
Varios organismos científicos canadienses y el grupo National Geograhic aceptaron financiar el proyecto, cuya idea surgió tras conversaciones con un conocido paleontólogo estadounidense, Jack Horner, quien fuera asesor técnico de los filmes de 'Parque Jurásico'.
Horner escribió recientemente un libro titulado 'Cómo construir un dinosaurio', donde cita los experimentos en embriones como parte de la búsqueda de crear un 'pollosaurio'.
Un paleontólogo canadiense que pasó años buscando animales prehistóricos fosilizados quiere ahora devolverles la vida manipulando pollos genéticamente, anunció el científico este martes.
Hans Larsson, de la cátedra de macro-evolución de la Universidad McGill de Montreal, espera poder reproducir en estos gallináceos las características de dinosaurios desaparecidos hace millones de años, manipulando genéticamente embriones de pollos.
Esta investigación está en sus inicios, reconoció el científico en una entrevista con AFP, pero podría conducir un día a producir reptiles prehistóricos vivientes. No obstante, Larsson no tiene planes de llevar la investigación a ese punto, por razones éticas y prácticas.
Construir una criadero para dinosaurios "sería una empresa demasiado vasta". El objetivo es solamente ofrecer una "ilustración de la evolución", dijo Larsoon, que ha estudiado la evolución de las aves durante 10 años.
"Si puedo demostrar claramente que el potencial para el desarrollo anatómico de los dinosaurios existe en los pájaros, entonces esto prueba que las aves descienden directamente de los dinosaurios", dijo.
Varios organismos científicos canadienses y el grupo National Geograhic aceptaron financiar el proyecto, cuya idea surgió tras conversaciones con un conocido paleontólogo estadounidense, Jack Horner, quien fuera asesor técnico de los filmes de 'Parque Jurásico'.
Horner escribió recientemente un libro titulado 'Cómo construir un dinosaurio', donde cita los experimentos en embriones como parte de la búsqueda de crear un 'pollosaurio'.
Dinosaurios o Dragones
Historia de los dinosaurios,
también llamados "Dragones" antes del 1822
Existe escasa información acerca del contacto entre el hombre y los dragones (nombre que se le daba a los Dinosaurios en la antigüedad). El nombre fue cambiado de Dragón a Dinosaurio en el año 1822 por un doctor inglés llamado Gideón Mandell, quien encontró gitanescos huesos enterrados (fósiles) de lo que evidentemente eran enormes reptiles y debido a su tamaño y debido a los inmensos dientes que algunos tenían, los llamó "Dinosauria": Dino = Monstruoso; Sauria = Reptil. A partir de ese momento, a lo que antes se conocía como dragones, a partir de ese momento se le comenzó a llamar por su nombre científico: Dinosaurios = Reptiles monstruosos.
Sabemos que para los tiempos del período más temprano de la civilización Egipcia, se había desarrollado una importante secta de adoración a los dragones en Egipto. Contamos con documentos procedentes de la antigua Babilonia, de las civilizaciones del Oriente, de las Islas del Pacífico y hasta del continente Americano que nos hablan de los asombrosos poderes y habilidades que estos inmensos animales tenían.
La civilización china, por ejemplo, estaba tan familiarizada con estos dragones, que cuentan con miles de dibujos que datan de hace unos 3.000 años, describiéndonos clases varias de dinosaurios: Alados, cuadrúpedos y acuáticos.
Encontramos historias de hombre valientes, guerreros, siendo contratados por poblaciones para que vinieran a pelear y a matar al terrible dragón que echaba fuego por la boca o que bloqueaba el camino entre poblaciones.
Los dragones eran especialmente comunes en las montañas de Escandinavia. Uno de los más temidos de estos dragones era uno llamado Nidhoggr, o el de las "mordidas amargas temerosas". Este dragón vivió por miles de años según las historias que aún sobreviven.
Sin embargo, la mayoría de los dragones de Escandinavia eran gigantescas criaturas de las aguas que vivían en las proximidades de las costas y cerca de las desembocaduras de los ríos. Se dice que los dragones acuáticos, o Krakens, levantaban sus enormes cabezas y sus largos cuellos desde el agua y que se llevaban a los marinos de los barcos.
Los Escandinavos temían tanto la ferocidad y el dominio territorial de estos dragones que colocaban cabezas de dragones (plesiosaurios) en los extremos de sus embarcaciones.
A menudo se reportaban embarcaciones totalmente hundidas y sus cargas y su tripulación totalmente perdidas. Estos incidentes se atribuían a ataques de dragones.
Por su parte los Griegos creían que los dragones eran fuentes sagradas de gran conocimiento y habilidades. Los romanos se unían a los griegos en estas creencias.
A muchas serpientes se les denominaba "Dragones Serpientes", las que hasta se usaban para guardar los templos. A menudo se tenían inmensos Pitones haciendo estas tareas. Un Pitón guardaba el Templo de Delfi, hasta que Apolo lo mató, dice la leyenda.
Otro dragón era llamado Ladón, el que se suponía que fuera muerto por el dios Hércules.
Se suponía que animales fuertes y que lanzaban fuego por la boca, virtualmente imposibles de matar, eran ideales para cubrir las entradas de misteriosos escondites de tesoros.
Los dragones se convirtieron en un reto para los hombres de valor probar que lo eran. Así comenzó una cacería insistente contra todos los dragones que se pudieran encontrar, ya que el que mataba a uno de estos inmediatamente se convertía en una celebridad.
Con el ocaso de las civilizaciones griegas y romanas, muchos de los datos históricos de encuentros con dragones se fueron convirtiendo en leyendas usadas para traer tiempos pasados al presente. Pero por muchos siglos, conforme comenzó la Edad Media, los dragones continuaron siendo animales muy temidos. Pintores de todas la épocas y de diferentes civilizaciones han pintado estos dragones de manera asombrosamente similiar. Sería infantil proponer que todos estuvieran inventando estas bestias en épocas diferentes y en lugares remotos, sin acceso entre sí. Desde pinturas rupestres hechas por tribus primitivas africanas hasta elaboradas pinturas medievales y renacentistas europeas muestran estas inmensas bestias siendo matadas por valientes guerreros, o simplemente aterrorizando a los pobladores de las villas.
Buscadores de fortuna, en vano buscando tesoros y oro, mataban a cuando dragón encontraban, ya que pensaban que la localización aproximada del dragón era donde se encontraban estas vírgenes fortunas.
LOS CAZADORES DE DRAGONES EN LOS TIEPOS MEDIEVALES
Uno de los primeros cazadores de dragones fue un guerrero de nombre Siegfried (en el lenguaje escandinavo, Sigurd) que vivió hace tanto tiempo que los detalles acerca de sus luchas contra dragones han perdido mucho. Algunas personas creen que Siegfried mató al Dragón Fafnir para obtener un gran tesoro. Unos siglos más tarde, nos dice una historia, que Beowulf mató a un dragón tan grande como el que mató Siegfried, pero en Inglaterra. Sin embargo, la historia nos cuenta que Beowulf fue herido de muerte por el dragón (Dinosaurio).
La primera batalla verdaderamente épica entre un hombre y un dragón que sobrevive con ciertos detalles es la del Santo George. Este santo católico vivió en los tiempos de Constantino y probablemente se crió en el área de Israel. Durante uno de sus viajes, él vino a la ciudad de Silene (o Sisena) en Libia. Ahí se enteró de la existencia de un dragón que vivía en un lago cercano y que era temido y repudiado por los vecinos porque iba a los pastos y se comía sus rebaños.
El caballero se preparó y fue y atacó al dragón con su lanza. Rápidamente aprisionó a la bestia y la llevó a la ciudad donde alegadamente le partió la cabeza. Este señor fue tan popular que el Papa lo canonizó y lo convirtió en Santo en el año 349, cuando se nombró como el Santo Patrón de Inglaterra. También se le dio ciudadanía honoraria cuando se descubrió que había nacido en Coventry, en Inglaterra.
Con el avance de la ciencia y con las teorías humanistas y evolucionistas que comenzaron a florecer, ya para el Siglo XVI, el Papa Clemente decidió que se eliminara la mención de Dragones de la biografía de San George. Más luego, el pobre George hasta fue expulsado del cielo cuando el Papa descanonizó al pobre héroe de otrora. Así se fueron eliminando todas las menciones sobre Dragones y Serpientes voladoras de todos varios documentos antiguos. Según los humanistas, ya no se podía dar cabida a historias tan descabelladas como las que parecían indicar que los dinosaurios o los dragones pudieron convivir con el hombre, ya que esto tiraría por tierra la noción evolucionista de que los dragones devieron haberse extinguido miles, sino millones de años antes que el hombre evolucionara.
No tan popular como el caso del Santo George, tenemos la historia proveniente de la Edad Media, cuando vivió un tal Gerolde. Para muchos, este señor andaba por los montes buscando dragones a quienes matar y otras criaturas horribles.
Gerolde se convirtió en un personaje tan popular y famoso que su nombre fue cambiado a Gerolde-el-bueno, debido a su obvia piedad al ayudar a los habitantes de estas tierras a librarse de estos horribles dragones.
El primer dragón que Gerolde mató fue uno relativamente pequeño, de unos 20 pies de largo, el que sorprendió y mató. Se dice que montado en su caballo, mientras se movía alrededor de la bestia, las reflexiones del sol en su vestidura plateada confundieron al dragón y antes de que el dragón pudiera responder, Gerolde lo mató con su lanza. Inmediatamente Gerolde fue considerado como el mayor de los matadores de dragones, y así fue como inmediatamente se le acercaron decenas de otros guerreros solicitándole que formaran los "grupos cívicos" para salir a cazar dragones. Así que Gerolde comenzó a viajar por toda la tierra con su grupo de centinelas y recibían grandes recompensas y galardones por su gallardía.
En una oportunidad, Gerolde encontró un gigantesco dragón y lo atacó con su confianza de invulnerabilidad. Esta vez su chaqueta de colores reflectivos no funcionó porque el cielo estaba nublado. El dragón, al ser atacado, lanzó una llamarada contra Gerolde incinerándolo en el acto. Sus seguidores recuperaron su cadáver y fue enterrado en la Catedral local con todos los honores posibles.
LOS DRAGONES PARA EL FIN DE LA EDAD MEDIA Y EL INICIO DEL RENACIMIENTO
Varios dragones también fueron matados en esta época, aunque evidentemente ya quedaban menos. Muchos hombres matadores de dragones alcanzaron su posición como Santos en la Iglesia Católica gracias a sus hazañas. Convertirse en cazador de dragones se convirtió en una forma fácil de obtener fama y fortuna para muchos hombres de esas épocas. Convertirse en santos no les caía mal tampoco. Eso les garantizaba el cielo si morían en el proceso de la cacería.
Estas historias, además de decenas de otras procedentes de estadistas, como Carlos Magno, de historiadores, como el fundador de la Historia, Heródoto y hasta de aventureros, como Marco Polo, no fueron presentadas aquí. Lo que sí parece consistente es que para los habitantes de África, Europa, Asia, y hasta las Américas, los otrora llamados "Dragones" (Dinosaurios), no eran fruto de su imaginación, sino un enemigo más con el cual enfrentarse.
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